
¿Qué pasaría si te digo que no necesitas intermediarios para conectar con lo Divino? Que la libertad espiritual no se encuentra en “seguir” ciegamente a otros, sino en asumir tu propio poder y atreverte a recordar quién eres, de Donde vienes y sobre todo… hacia dónde vas.
Hoy quiero compartirte un pequeño fragmento de Paulo Coelho que sacude, despierta y te invita a volver a ti, espero te regale una nueva forma de ver, deja que escuche tu alma:
“…¡Ay de aquellos que buscan pastores, en vez de ansiar la libertad! El encuentro con la energía superior está al alcance de cualquiera, pero está lejos de aquellos que transfieren su responsabilidad hacia los demás. Nuestro tiempo en ésta tierra es sagrado y debemos celebrar cada momento…”
“La Bruja de Portobelo”, Paulo Coehlo
Este fragmento nos otorga una máxima muy poderosa; la libertad interior y la conexión con lo Divino están en nuestras manos, no en la de otros. Y es que buscar figuras externas que guíen cada paso que damos, esperando siempre que nos den las respuesta y su aprobación, es ceder nuestra responsabilidad y con ello, otorgarles el poder sobre nuestra vida y nuestra espiritualidad.
Claro que puede parecer más cómodo depender de alguien más y dejar que nos guíe, que asumir nuestro propio poder, porque asumirlo implica responsabilidad y compromiso sobre nuestro propio proceso de Despertar de consciencia y eso, a veces nos asusta; y es que la búsqueda de conexión del ser humano con lo Divino es una “necesidad” del alma misma por expandirse que siempre ha existido, solo que estábamos acostumbrados a que nos dicten los pasos a seguir para que esa Divinidad nos viera con buenos ojos.
Pero ¿Qué pasaría si te digo que Dios ve con buenos ojos tu felicidad y tu expansión, que Él no tiene prisa en tu proceso, que aguarda paciente a que le pidas Guía y Dirección y sobre todo… que te Ama y solo quiere lo mejor para ti?
La certeza de que existe algo Superior a nosotros era una certeza que a veces se vive desde el miedo, desde la creencia en el castigo si no cumplimos al pie de la letra con ciertos requerimientos que se nos ha inculcado que nuestro Dios necesitaba de nosotros para no castigarnos. Pero hoy en día, el ser humano se ha abierto a las infinitas posibilidades de consciencia y eso me encanta, porque Dios tiene sus Grandes Obras de Amor Incondicional, entre ellas, está el comenzar a reconocer y aceptar que la Divinidad habita dentro de cada uno de nosotros, porque claro que hemos sido creados a imagen y semejanza de Dios, pero quizá no desde el aspecto físico, sino desde la Divinidad que te contiene en cada una átomo que te compone, eso es evolución, eso es consciencia, eso es Despertar.
Cuando Coelho habla de que “…la energía superior está lejos de aquellos que transfieren su responsabilidad hacia los demás…” nos invita a comprender que el despertar espiritual no es un botón que alguien más tenga que venir a presionar por ti, cada uno de nosotros nacimos con la capacidad y el libre albedrio para despertar los recuerdos más profundos de nuestro ser y definitivamente creo que no venimos a vivir ésta experiencia llamada vida para atarnos y encogernos bajo la sombra de estigmas y adoctrinamientos que nos dictan cómo “debe” ser nuestra espiritualidad, enmarcando estrictamente lo que debemos ser y llevándonos a crear y sostener personajes espirituales que en realidad no tienen nada que ver con nuestra más profunda esencia.
Y es que yo creo que la experiencia del Despertar del alma, no posee una única guía o un único rumbo ya trazado por personas evolucionadas, sobre cómo debe ser o no el proceso de expansión de tu consciencia; y es que cuando miras hacia adentro, cuando conectas con lo Divino desde la sencillez de la expresión de tu propia esencia a través del encuentro más profundo y más íntimo entre lo Divino, el silencio de tu mente y la sincronía de tu respiración, absolutamente todo cambia, todo se reordena y todo comienza a tener sentido y comienzas a experimentar la vida desde lo Sagrada que realmente És.
Y es que al final del día no importa en lo que creas o en a que ser superior otorgues tu fe, eres un ser con libre albedrío, ejerce tu capacidad de elección, solo asegúrate que aquello en lo que Creas, te haga vibrar de expansión, te haga sentir paz y amor; para nada creo que te defina aquello en lo que crees, pero sí aquello que vives y aquello que expresas; la regla es simple, que el recurso que te acerque a Dios, al Universo, la Fuente o como lo decidas llamar, te invite a expresar la compasión, la empatía, la gratitud, que te lleve a expresar tu autenticidad y no a negarte a ti mismo, que te invite a transformar tus experiencias en aprendizajes, que te lleve a caminar en la coherencia de lo que piensas, sientes y haces, que te lleve a ser tu mejor versión en el camino del despertar de tu alma a la Consciencia plena. No hay enfoques buenos o malos, simplemente se trata de que lo que sea que practiques como medio o recurso para conectar con lo Divino, te lleve a expresar tu autenticidad, te guie a liberarte de condicionamientos, pues no se trata de ser perfectos, sino de ser coherente contigo mismo.
Ya con bastante hemos crecido siguiendo las normas, etiquetas y lealtades familiares que nos dictaron cómo debíamos ser y de qué manera vivir nuestra espiritualidad. Hoy cuestiónate ¿esta práctica de tu espiritualidad me lleva a conectar conmigo mismo? ¿Me expande? ¿Me inspira a ser mejor? ¿Me conecta desde la compasión y el respeto con todas las formas de vida? ¿Me da paz o me hace sentir culpa?
Porque lo espiritual no te aleja del mundo, al contrario, te conecta más profundamente con él y contigo mismo, te lleva a reconocer tu Unidad con el Todo y con Todo.
Y que no se te olvide que cuando Coelho no dice que “…nuestro tiempo en la tierra es sagrado, debemos celebrar cada momento…” es una invitación franca a que ya no sigas caminando como si estuvieras muerto en vida ahogado y estancado en la rutina ¡levántate! ¡despierta! ¡muévete! estamos aquí para vivir despiertos y celebrar cada momento como el milagro que és. Hoy te invito a soltar esa obediencia vacía y a abrazar tu verdad más libre, porque si, nuestro tiempo en la tierra es breve y en verdad deseo que aquello en lo que creas, realmente te haga sentir feliz, para que este viaje llamado vida, esté lleno de compasión, plenitud, bienestar y dicha, porque sí, lo mereces.
Yo Soy y mi nombre es Karo, mil gracias por permitirme sintonizar contigo.
Añadir comentario
Comentarios